Cada vez más son más recurrentes las infecciones vaginales en la mayoría de las mujeres, lo que puede ocasionar inflamación pélvica, lo cual es un riesgo si se encuentran embarazadas tanto para él bebe como para la madre, riesgo de contraer infección por inmunodeficiencia humana o bien infertilidad.
Las infecciones del aparato genital femenino pueden o no presentar sintomatología según sea el caso y estos síntomas en caso de haberlos van desde un cambio en el flujo vaginal es decir puede incrementar, cambiar de tonalidad, de consistencia y de aroma (mal olor).
Es por ello que es importante acudir de manera regular con el ginecólogo para llevar a cabo una serie de estudios para poder identificar si se trata solo de una infección o de un virus para poder determinar el tratamiento que se debe seguir en caso de presentar cualquiera de los casos anteriores y que no se convierta en un riesgo para nuestra salud o en caso de estar embarazada no corra riesgo el feto.
En el país de México se formó un catálogo sobre vaginitis vs vaginosis en el que podemos encontrar sugerencias para la prevención, diagnóstico y tratamiento de las mismas.
La Cervicovaginitis infecciosa es la inflamación de la inflamación de mucosa vaginal; puede ser ocasionada por hongos, protozoario trichomonas vaginalis y bacterias; y como síntomas de esta pueden presentarse un incremento en el flujo vaginal, comezón, mal olor, ardor, irritación, mal olor causado por microorganismos patógenos como puede ser la Gardnerella vaginalis, estreptococo B o candida albicans a este concepto también le podemos sumar la vaginosis bacteriana que se caracteriza por el crecimiento excesivo de organismos anaeróbicos y pérdida de lactobacilos además de perder su acidez vaginal normal incrementándose el PH a >4.5.
Existen diferentes variedades de vaginitis, que podemos estudiar en Curso de Citopatología Ginecológica, las cuales son las siguientes:
· Vaginitis por cándidas
· Vaginosis bacteriana
· Tricomoniasis
· Chlamydia trachomatis (CTH)
Los estudios para determinar el tipo de vaginitis son de fácil acceso y son:
o Frotis o estudio citológico vaginal
o Medición de PH
o Estudios de laboratorio solo en caso de ser pacientes con un alto riesgo de ser portadores de enfermedades de transmisión sexual
o Cultivo
o Pruebas de ácido nucleico
En la vagina sana normalmente encontramos diferentes tipos bacterias. Sin embargo se puede ver alterado el equilibrio entre estas y pueden producirse las condiciones necesarias para que exista la vaginosis bacteriana. Esta alteración suele ser causada por Gardnerella vaginalis.
Cualquier factor que modifique el pH de la vagina puede interferir en el equilibrio y generar una vaginosis bacteriana. La vaginosis bacteriana no es considerada una enfermedad de transmisión sexual sin embargo tener una pareja nueva o muchas parejas puede aumentar el riesgo para que se presente esta infección.
Este tipo de infección no siempre presenta síntomas por ello es difícil saber que se contrajo o bien los síntomas son leves, como por ejemplo un flujo vaginal delgado abundante y con fuerte olor a pescado, de color blanco, gris apagado, verde, o espumoso.
Para su diagnóstico se emplean estudios de fácil acceso como frotis vaginal (PAP o GRAM), medición de pH vaginal.
Este tipo de vaginosis bacteriana se clasifica en 3 grados:
Grado I: se clasifica como normal y predominan los lactobacilos
Grado II: se clasifica como intermedio y podemos encontrar lactobacilos, Gardnerella o Mobiluncus.
Grado III: se clasifica como vaginosis bacteriana y podemos encontrar Gardnerella o Mobiluncus pocos lactobacilos o ausencia de los mismos.
Normalmente el tratamiento para una Vaginosis Bacteriana (VB):
§ Metronidazol de 400 o 500 mg, vía oral 2 veces al día por 5 o 7 días
§ Metronidazol 2 g, vía oral en una sola dosis
§ Metronidazol local vaginal por 5 días
§ Tratamiento alternativo tinidazol 2 g, orales por 2 días o 1gr. Oral por 5 días
§ Clindamicina 300 mg vía oral por 7 días
§ Clindamicina local vaginal 100 mg por 3 días
Cuando la paciente se encuentra embarazada se recomienda un tratamiento para evitar la ruptura de las membranas sin embargo tiene que estar bajo vigilancia médica para evitar complicaciones.
La candidiasis vaginal complicada es cuando se presenta por periodos prolongados o de manera recurrente, pueden presentar signos y síntomas severos sobre todo en mujeres que presentan una patología complicada como la diabetes, inmunosupresión o resistencia al tratamiento.
Los azoles tópicos y orales son muy efectivos (80%) en una candidiasis no complicada.
En cambio en una vulvovaginitis complicada debemos emplear un tratamiento más agresivo incluyendo una vía sistémica y local.
En caso de que se presente una chlamydia los medicamentos para el tratamiento pueden ser los que siguen:
📷 Azitromicina 1 gr oral en una sola dosis
📷 Doxiciclina 100 mg VO 2 veces al día por 7 días
O bien de manera alternativa:
📷 Eritromicina 500 mg cada 6 hrs por 7 días
📷 Levofloxacina 500 mg VO una vez al día por 7 días
📷 Ofloxacina 300 mg cada 12 hrs por 7 días
La doxiciclina y la levofloxacina están contraindicadas durante el embarazo.
Como conclusión personal es recomendable siempre acudir con el ginecólogo por lo menos 1 vez al año y realizarnos los chequeos o análisis pertinentes para evitar que una infección se nos complique cada vez más o en su defecto sea causa de molestias innecesarias.
Muy interesante
Interesante! Justo lo que estaba buscando.