La OMS ha declarado la infección por el nuevo coronavirus (COVID-19) como Enfermedades pandémicas debido a la propagación de la infección por todo el mundo. Es una enfermedad extremadamente infecciosa caracterizada por una alta morbilidad y tasa de mortalidad. El desarrollo de vacunas y medicamentos aún está en proceso de etapas iniciales. Por tanto, la mejor estrategia para limitar esta mortal infección es el distanciamiento social, rastreo de contactos y pruebas vigorosas para identificar y poner en cuarentena los casos positivos.
Los casos de portadores asintomáticos son la principal preocupación por la propagación de infección en la comunidad. Según un estudio realizado recientemente, el estimado de la proporción asintomática fue del 17,9% (intervalo creíble del 95% (CrI): 15,5-20,2%) y existe la posibilidad de que estos pacientes no visite el centro de salud para las pruebas. Además, las limitaciones financieras, los recursos, la infraestructura y los recursos humanos hacen imposible probar cada caso sospechoso.
Estas importantes limitaciones podrían exagerar la propagación de la infección y, por tanto, necesita atención urgente. El receptor de la enzima convertidora de angiotensina II (ACE2) se ha identificado tificado como el dominio de unión para el receptor de pico de COVID-19 virus. Una vez que la infección ingresa a la célula huésped, la replicación del virus y desprendimiento conduce a manifestaciones clínicas relevantes. Curiosamente, adjuntar- El mecanismo del receptor de pico también causa el agotamiento de los receptores ACE2, que además conduce a diversas morbilidades. Por tanto, debido a los cambios en la expresión, la expresión de ACE2 se puede aprovechar para la detección o cribado de la infección por COVID-19.
Curiosamente, los receptores ACE2 se han identificado en el estratificado epitelio escamoso de la mucosa oral normal. La literatura también apoya puertos a la cavidad bucal como una de las rutas para la entrada de COVID 19. Por lo tanto, las células epiteliales orales son los objetivos potenciales para la iniciación y progresión de la infección por COVID-19. La citología exfoliativa el cepillado y la biopsia se utilizan de forma rutinaria en la práctica de patología oral para obtener células epiteliales para investigación. Con ambas técnicas, es posible recuperar células de la ubicación basilar y suprabasilar más profunda. Por lo tanto, es concebible para recuperar fácilmente las células epiteliales positivas de COVID-19 de pacientes positivos. Este conocimiento se puede aprovechar para la detección temprana de infección y desarrollo de un modelo de enfermedad adecuado.
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